miércoles, 5 de junio de 2013

Futuro, narración por Isabelle Four

Hoy quiero compartir con todos vosotros una narración que presenté a un concurso de narraciones en mi instituto y que resultó ser la ganadora de narrativa de mi ciclo.
Ésta narración la presenté con el pseudónimo del blog (Izzy Four), y trata sobre cíborgs, que son humanos con chips inteligentes.
Ahora pensaréis, ¿de dónde saqué la idea? Pues la idea de esta narración la saqué de un artículo de una revista que trataba sobre eso, sobre cíborgs. Allí comentaban que dentro de unos años los humanos tendremos inteligencia artificial gracias a unos chips. Este artículo me hizo pensar: ¿qué pasaría si una adolescente que vive en un mundo controlado por esos chips tuviera que sobrevivir con su familia resistiéndose a ellos? Y a partir de ese día empecé a escribir esta narración.
Me gustaría comentar que me encanta escribir, y que lo hago cada rato que puedo. Llevo una historia/novela empezada desde hace casi un año y otra desde hace unos meses. Me encantan los temas fantásticos y futurísticos, pero que mezclen también un poco de amor, intriga y misterio.

Y después de toda esta charla, aquí tenéis mi narración, traducida del catalán al castellano para que la entendáis.
¡¡Espero que os guste!!
¡Y no olvidéis dejar un comentario!


----------------------------------------------------------------------------

Futuro

Siento unos gritos aterradores y me despierto. Es mi hermana, que seguramente vuelve a tener pesadillas. Es una niña muy alta, tiene el pelo liso y negro, y unos grandes ojos verdes, como yo. Me levanto de esta cama improvisada con paja y voy a calmarla.
-¡Eh! Tranquila, que aquí estoy yo. ¿Qué te pasa?
Llorando, mi hermana contesta:
-Otra vez soñé que nos encontramos y nos volvíamos como ellos. ¡Era horrible!
-Bueno, tranquila, no pasará nada. En esta cueva estamos bien y no nos encontrarán nunca.
-Pero es que ... mira papá ...
-No nos pasará nada. Y ahora a dormir.
Me voy a mi cama para seguir durmiendo, aunque no lo puedo hacer ya que sé por qué tiene esas pesadillas. Hace cinco años que lo poco que queda de la humanidad nos estamos ocultando del resto del mundo. Se pusieron de moda unos "chips" que, si te los ponían en el cerebro, te prometían la inmortalidad, la superinteligencia y no sufrir ninguna enfermedad. La gente empezó a ponérselos y pasaron a ser cíborgs controlados para captar a la humanidad y obligarlos a que se convirtieran. La tecnología esclavizaba la gente. Nosotros nos dimos cuenta de lo que pasaba, aunque era muy difícil, ya que los cíborgs tienen la apariencia de un humano normal y corriente, sólo tienen una marca identificadora en la palma de la mano. Nos escapamos de nuestra ciudad con un grupo de gente que también había descubierto la verdad y nos refugiamos en desiertos, bosques y otros lugares no habitados hasta ese momento, ahora vivimos en una cueva subterránea y no demasiado grande que hicimos adaptar para vivir junto a un bosque.
En una de las expediciones que hicimos para buscar otro lugar seguro para ocultarnos, mi padre fue capturado por los cíborgs. Esto afectó mucho a mi hermana pequeña, que le adoraba. Ya lo damos por muerto, aunque seguramente se habrá convertido en uno de ellos. Aunque recuerdo sus últimas palabras: «Dejadme ir, iros fuera de aquí!»
En nuestras clases, la maestra de nuestro grupo nos dijo que esto que ahora padecemos los humanos es culpa de nuestros antepasados, que querían más de lo que ya tenían y nunca se conformaban. Para ellos no era suficiente tener unos buenos ordenadores, o un coche para viajar. Querían ser más inteligentes, ver mejor y tener un ordenador que trabajara para ellos mismos dentro de la cabeza. Y gracias a los que apostaron por esta inteligencia artificial han hecho que el mundo tal como lo conocían cambiara totalmente.
Ya por la mañana, vamos mi hermana y yo a desayunar. Ella no ha dicho nada en todo el camino, algo muy raro en ella. Siempre es tan habladora ...
Afuera de la cueva nos encontramos todos reunidos en un círculo, todos sentados en el suelo. Intento localizar mi madre, pero no está. Hace unos días que no la vemos. Mi abuelo dice que está en la cueva de al lado, la reservada para los enfermos. Seguramente está enferma, pero lo que más nos preocupa es que no podemos ir a verla. Así lo ha mandado ella.
Nos sentamos en círculo. En medio hay un hombre muy alto y joven, de unos veinte y cinco años aproximadamente, que no sé cómo se llama ya que lo conozco de vista. Empieza a hablar:
-Os informo de que después de desayunar haremos una expedición todas las personas mayores de quince años y menores de treinta que vivan aquí. Iremos a la ciudad a buscar medicinas. Tenemos una integrante del grupo bastante enferma y necesita las medicinas urgentemente, si no, morirá. Además aprovecharemos para buscar comida y otros productos de primera necesidad.
Sólo puedo decir que gracias a este discurso me he dado cuenta de dos cosas: mi madre está gravemente enferma y hoy arriesgaré mi vida por ella.
-No quiero que te vayas sola y me dejes aquí.
-No me voy sola, voy con mucha gente más. Y lo hacemos por mamá.
-Y si te cogen, como a papá? Y si no puedes volver nunca más y me quedo sola porque mamá se muere?
-Lo tengo que hacer, no tengo otra opción.
Tras desayunar me despido de mi hermana y comienzo a caminar por el bosque con un grupo de veinte personas aproximadamente. El hombre de antes empieza a hablar:
-La estrategia será la siguiente: nos separaremos en grupos de cinco personas. De estos grupos, tres irán hacia las farmacias y dos hacia los hospitales. En el hospital entraremos por las puertas de atrás y nos colaremos en los almacenes. En las farmacias aprovecharemos la hora de descanso para entrar y coger lo que necesitamos: las pociones Fiebre, Picadura, Inflamación, Herida, Roturación; vendas y otros materiales que podáis conseguir. ¿Entendido?
Seguimos caminando y pasamos en grupos de cinco (a mí me toca con gente de mi edad) por las puertas de seguridad que dan entrada a la ciudad. Llevo unos guantes puestos para que no se note nada que no soy un cíborg pero, ¿por qué no se dan cuenta? ¿No eran tan listos y tan perfectos?
Vamos caminando por las calles y me doy cuenta de que nos están siguiendo.
-¡Chicos! ¡Nos están persiguiendo! Debemos ir más rápido.
Todos me escuchan y empezamos a correr. ¿Como podremos salir de aquí? De repente aparece mi hermana. «Te lo he dicho». Ahora tengo que pensar qué hacer. No quiero ser uno de ellos, manipulados por unos ordenadores. Antes de eso preferiría cien mil veces morir. Las figuras se acercan hacia nosotros. Corremos más bien pero aparecen más figuras ante nosotros. Estamos atrapados, sin escapatoria.
Nos consiguen atrapar y nos arrastran hacia un edificio muy extraño: todo pintado de negro, sin ninguna ventana y se alza más allá de las nubes. Entramos y nos damos cuenta de que todas las paredes son transparentes y se escucha todo lo que pasa en la calle. ¡Por eso nos han identificado! Nos llevan hacia una habitación aparentemente vacía pero, de repente, aparece un hombre que me parece familiar. Es mi padre.
-Hija mía! Sabía muy cierto que nos volveríamos a encontrar. Ahora, al fin, estaremos juntos después de cinco años. ¿Sabes? Siempre has sido mi hija preferida.
No contesto, ya no es él. Me intento deshacer de las fuertes manos del ciborg que me sujeta, pero es imposible.
-No te resistas, hijita mía. Cuanto más fuerza malgastes, más dolorosa será la transformación. Además, oponer resistencia al trasplante del chip es ilegal. Y vale la pena. Mírame a mí, ahora soy el líder.
-No lo queremos.
El chico que habla saca un cuchillo y lo clava en cíborg que la coge. Este cae al suelo con el cuchillo a su lado, lleno de sangre. El el chico vuelve a coger el instrumento y nos intenta ayudar a escapar pero entran más cíborgs, todos con jeringas. Seguramente tienen el líquido que contiene el chip. Seguro que ya tienen bien planteado nuestro futuro.
Un cíborg se acerca a mí y me clava la jeringa en el cuello, la más grande que he visto en mi vida. El líquido va entrando en mi cuerpo y se va por las venas.
Todo es oscuro.


Izzy :)

lunes, 3 de junio de 2013

La Frase de la Semana

Después de muchos días sin publicar una frase de la Semana, la frase de hoy es un adelanto que me ha gustado mucho de Ciudad del Fuego Celestial, el último libro de la saga Cazadores de Sombras de Cassandra Clare.


"Soy un guerrero. Me criaron como un guerrero. No tuve juguetes, tenía armas. Dormía con una espada de madera hasta que tuve cinco años. Mis primeros libros eran demonologías medievales con páginas iluminadas. Las primeras canciones que aprendí eran cantos para desvanecer a demonios. Sé lo que me trae paz, y no son playas desiertas o los pájaros cantar en la selva. Quiero una arma en mi mano y una estrategia para ganar."

Jace Lightwood


Nuestro Jace... Ay Jace, ¡sigue así!

Izzy :)

Las ventajas de ser un marginado



Hoy os traigo un libro que me gustó mucho, Las ventajas de ser un marginado de Stephen Chbosky. Este libro cuenta con una reciente adaptación cinematográfica en la cual el protagonista es interpretado por Logan Lerman y otro personaje importante (Sam) por la famosísima Emma Watson, conocida por Harry Potter.
Gracias a la película, este libro ha llegado a España desde Estados Unidos, donde se escribió hace mucho más de diez años.